Tengamos en consideración que la adolescencia moderna no es la misma que era hace 30 años, principalmente por la aparición de las nuevas tecnologías que hay que saber utilizar, en tiempo y forma.
No es fácil interpretar que como un adolescente nació en esta generación de las tecnologías nuevas, sabe todo acerca de estas. De hecho es la interpretación más fuera de lugar que he escuchado.
Es cierto que los adolescentes tenemos derechos y obligaciones y es nuestra responsabilidad cumplirlas; más sin embargo, los adultos no deben olvidar que en algún momento ellos estuvieron en nuestras posiciones y que ahora es totalmente diferente.
Siendo un adolescente puedo decir que esta etapa no es nada fácil, y especialmente este año escolar ha sido el más difícil que he enfrentado por sus grandes retos académicos como sociales.
Puede que la vida te prepare para algo más difícil que vendrá.
Pero no hay que olvidar aquellos adultos que creen que nuestra vida y contribución a la sociedad es fácil que en algún momento estuvieron en nuestra posición y que el tiempo ha cambiado demasiado en este nuevo siglo.
Carlos Aboytes Martínez. Blogger.
Definitivamente es una etapa difícil en la que nuestros adolescentes tienen nuevos retos y obligaciones.
ResponderEliminarComentario. Verónica Martínez.
Hay cierta razón en recordar nuestros tiempos y no pedir más de lo que nosotros dábamos, más sin embargo que haya un equilibrio en lo que nosotros como padres le damos y ellos nos dan.
ResponderEliminarComentario. Héctor Mauricio Aboytes.
Es cierto que estas nuevas tecnologías tienen a estos chicos en un mundo totalmente distinto al que era para nosotros, tenemos que pedir con cuerdo al tiempo en que viven.
ResponderEliminarComentario. Antonio Martínez.
Es cierto que estas nuevas tecnologías tienen a estos chicos en un mundo totalmente distinto al que era para nosotros, tenemos que pedir con cuerdo al tiempo en que viven.
ResponderEliminarComentario. Antonio Martínez.
Hay cierta razón en recordar nuestros tiempos y no pedir más de lo que nosotros dábamos, más sin embargo que haya un equilibrio en lo que nosotros como padres le damos y ellos nos dan.
ResponderEliminarComentario. Héctor Mauricio Aboytes.